Los tres textos anteriores se consideran textos instructivos.
Su
finalidad es eminentemente práctica, puesto que tienen
la intención de
proporcionar las instrucciones necesarias para llevar a cabo alguna
tarea: poner en funcionamiento o reparar una máquina; montar un mueble,
un juguete o cualquier artefacto; precauciones con los medicamentos que
te ha recetado el médico, elaborar una receta de cocina, curar una
herida, etc.
- Para dar instrucciones, hay que:
- Dejar claro qué finalidad se persigue; por
ejemplo: Instrucciones para
descongelar alimentos.
- Ser claro, preciso y breve.
- No saltarse ningún paso por evidente que sea.
- Estructurar tu escrito en partes:
- 1. Título: donde se presenta el objetivo.
- 2. Componentes, materiales, ingredientes, etc.
- 3. Proceso de elaboración o etapas de montaje, etc.
- 4. Imágenes de apoyo para el proceso o las etapas
(esta
parte es opcional)
- Seguir un orden lógico o cronológico; para ello se pueden numerar
los
párrafos o bien usar expresiones como:
- 1. Primero….; en primer lugar…; lo primero que hay
que
hacer…
- 2. En segundo lugar….; a continuación…; después…;
posteriormente…;
- 3. Por último…; para terminar…; finalmente…;
- Los verbos:
- 1. En imperativo: coge, junta, mezcla,…
- 2. Forma impersonal: se atornilla, se bate, se
juntan las
dos partes,….
- 3. En condicional para los consejos y
recomendaciones: Deberías lavarte las manos.
- 4. Perífrasis verbales:
- haber que +
infinitivo:
hay que lavarse las manos
- haber de + infinitivo:
has de lavarte las manos
- deber +
infinitivo:
debes lavarte las manos
- tener que +
infinitivo:
tienes que lavarte las
manos