Disfrutar
de la vida
(L. Tolstoi)
Un hombre rico y emprendedor se horrorizó
cuando vio a un pescador tranquilamente recostado junto
a sus barca contemplando el mar y fumando apaciblemente
su pipa después de haber vendido el pescado.
- ¿Por qué no has salido a pescar? le
preguntó el hombre emprendedor.
- Porque ya he pescado bastante por hoy?
respondió el apacible pescador.
- ¿Por qué no pescas más
de lo que necesitas? -insistió
el industrial.
- ¿Y qué iba a hacer con
ello? preguntó a su vez el pescador.
- Ganarías más dinero fue
la respuesta y podrías poner un motor nuevo
y más potente a tu barca.
Y podrías ir a aguas más
profundas y pescar más peces. Ganarías lo
suficiente para comprarte unas redes de nylon, con las
que sacarías más peces y más dinero.
Pronto ganarías para tener dos barcas
Y hasta
una verdadera flota. Entonces serías rico y poderoso
como yo.
- ¿Y que haría entonces?
preguntó de nuevo el pescador.
- Podrías sentarte y disfrutar
de la vida respondió el hombre emprendedor.
- ¿Y qué crees que estoy
haciendo en este preciso momento? respondió
sonriendo el apacible pescador.

|