LA HISTORIA DE DWYNWEN

Hace muchos, muchos años vivía un rey. Este rey se llamaba Brychan Brycheinion. Era el ei de Gales. I tenia veinticuatro hijos todos ellos muy hermosos, pero su hija Dwynwen los superaba a todos en belleza. Su cabello era tan negro como la mas negra noche, su piel blanca como la nieve y sus labios rojos como el vino.
Un día el rey preparó una gran fiesta dónde todo el mundo fue invitado, entre los invitados había un príncipe que se llamaba Maelon Draffodill. El y Dwynwen se enamoraron al instante. El príncipe preguntó a Dwynwen si querría casarse con el, ella estaba encantada con la proposición pero sabia que primero debía pedírselo al rey. El príncipe se apresuró a pedirle al rey la mano de su hija Dwynwen. El rey se puso furioso ante esta propuesta i le dijo " Mi hija ya está prometida en matrimonio con otro rico príncipe". Maelon se fue sin ni siquiera despedirse de Dwynwen, tenia el corazón roto. Dwynwen estaba muy dolida y corrió hacia el bosque y rezó para curar su corazón roto. Pronto se durmió. I tuvo un sueño, en su sueño se le apareció un angel que le ofreció una copa de oro. Dwynwen bebió de la copa y se le concedieron tres deseos. Ella deseó no volver a enamorarse jamás. Dwynwen se hizo monja y se construyó una iglesia en Llanddwyn.
La iglesia aún se puede ver junto a una cruz que conmemora a Dwynwen.
En Gales celebramos el 'Dydd Santes Dwynwen' el 25 de enero. Las parejas se entregan cartas.