ARTICLES D'INTERÈS PEDAGÒGIC |
EL DORMIR |
Los españoles duermen 40 minutos menos que el resto de los europeos BARCELONA. (Redacción.) - Los españoles duermen una media de 40 minutos menos que el resto de los europeos, porque por costumbres sociales retrasan la hora de ir a la cama. Lo mismo hacen los jóvenes, que se van a dormir lo más tarde que pueden. Y eso que los especialistas advierten que el 90% de las personas necesita dormir entre 7 y 8 horas -a un 5% le basta con 5 o 6 y al otro 5% necesita 9 o 10- y que no dormir lo suficiente o bien de manera repetida es síntoma y a la vez causa de diversas dolencias. No dormir puede causar desde fatiga a depresiones u otras dolencias, sin olvidar accidentes de tráfico, laborales o domésticos, según advirtieron ayer los especialistas con motivo del día mundial dedicado a concienciar sobre la necesidad de dormir bien. El insomnio afecta a un 30% de la población en España (un índice similar a otros países). Para un 10% es un problema grave, aunque sólo una de cada diez personas que duerme mal va al médico. Lo normal es automedicarse o recurrir a otros remedios "caseros" que no funcionan si no se diagnostica y resuelve al causa del insomnio, según indicaron Eduard Estivill y Teresa Sagalés, responsables respectivamente de las unidades del sueño de la clínica Dexeus y del hospital Vall d'Hebron. La causa más común de insomnio suele ser la angustia y el estrés acumulados durante el día, que hacen que se duerma mal, y al día siguiente se suma a la situación fatiga, lo que la empeora, en un ciclo que debe cortarse de raíz yendo al origen del problema (por ejemplo, en personas angustiadas, enseñándoles a relajarse). Para tratar el problema, los médicos recurren a tratamientos farmacológicos y otros que no lo son. En contra de lo que se pueda pensarse el insomnio no es sólo un problema de ejecutivos. También afecta a las personas mayores y niños; y más a mujeres que a hombres. La Vanguardia - 22/03/2001
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SOCIEDAD JOSEP CORBELLA Al menos 10 horas diarias. Es lo que deben dormir los escolares, aunque muchos no lo hacen. Un descanso insuficiente repercute en un menor rendimiento académico, en el carácter de los niños y niñas, que se muestran más irritables y, a la larga, provoca trastornos de salud. El profesorado ha empezado a expresar su preocupación porque muchos escolares no descansan bien y se refleja en su actitud en las aulas. Diez horas, hasta 11, depende de los especialistas, es el tiempo que se recomienda que duerman los niños y niñas de 5 o 6 a 10 u 11 años. A partir de los 11 se puede ir reduciendo el periodo de sueño para, tras la adolescencia, adoptar la pauta adulta, que es dormir 7 u 8 horas diarias. "El sueño varía en cada persona, hay quien es madrugador, quien nocturno, quien sólo necesita 6 horas y quien 10, sin que ningún caso sea anormal, pero cada persona debe dormir lo que necesita. Y un escolar de primaria debe dormir al menos 10 horas. No dormir lo suficiente hace que el niño esté distraído o nervioso y presente trastornos de conducta como irritabilidad", explica Teresa Sagalés, neurofisióloga responsable de la unidad del sueño del hospital Vall d'Hebron. Los niños suelen dormir menos de lo necesario, sobre todo en ambientes urbanos, afirman los expertos. En las escuelas aumentan las quejas de profesores y las reflexiones en las reuniones con padres sobre la impresión de que muchos alumnos no descansan bien, indica Marta Carranza, educadora del programa de promoción de la salud del Institut Municipal d'Educació de Barcelona. "Históricamente -añade- las primeras horas de la mañana se han reservado para las asignaturas más duras, pues se decía que los alumnos estaban más frescos y abiertos al aprendizaje, pero el profesorado ha empezado a inquietarse por la falta de ritmo de los alumnos en esas horas, lo que apuntaría la necesidad de reajustar el horario. No sería un asunto fácil de resolver". El lunes es el peor día. Carranza culpa a la ruptura de la rutina el fin de semana. M. Assumpció Roset, del programa Educació per la Salut del Departament d'Ensenyament, corrobora que un horario de sueño no uniforme es tan malo como dormir poco. "Los niños deben acostarse cada día a la misma hora, si varía el horario, el sueño es menos reparador", explica Eduard Estivill, responsable de la unidad del sueño de la clínica Dexeus y del Hospital General de Catalunya. La ruptura de la rutina parece inevitable en vacaciones. Estivill asegura que para recuperarla no hay más truco que seguir un horario. Si el niño no se quiere acostar pronto, no hay que dejarle dormir más por la mañana, así tendrá sueño antes. La rutina debe ser más rígida, incluso el fin de semana, cuanto peor hábito de sueño tenga el niño. ¿Y por qué no duermen más los niños? Médicos y educadores lo atribuyen a los hábitos sociales: los padres llegan tarde de trabajar y muchos niños, de las actividades extraescolares; se cena tarde, se ve televisión... Carranza cree que se debería reflexionar sobre estos hábitos. La cuestión se debate también en países como Estados Unidos. En los niños de menos de 5 años, no dormir lo suficiente se traduce, según Estivill y Sagalés, en más episodios de sonambulismo y pesadillas. De ahí que se desaconseje suprimir la siesta en los más pequeños. Pero dormir bien también vale para los chicos mayores, los más reacios a acostarse pronto. Un estudio de Rosa M. Amatller, experta en nutrición y salud escolar, sobre los hábitos de 478 estudiantes de ESO de Barcelona, en el curso 1999-2000, indica que un 46,3% de las chicas y un los 42,9% de chicos de primero (12-13 años) dice dormir más de 8 horas. En el curso superior (13-14 años) duerme más de 8 horas la mitad: un 27,5% de las chicas y un 20,3% de los chicos. Un 23% de los alumnos de primero y un 36% de segundo duerme 7 u 8 horas y un 2,5% de los chicos de segundo duerme menos de 6.
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