Los ríos de Catalunya,
excepto la Garona que desemboca en el océano Atlántico, desembocan
en el mar Mediterráneo.
Los que nacen en los Pirineos tienen un caudal más regular que aquellos
que nacen en las sierras del litoral.
En la actualitad se está haciendo un gran esfuerzo por eliminar la
contaminación de ellos.