Fecha del viaje
Puente del 1 de noviembre con vuelo en Ryanair
Moneda
Es la libra esterlina que se cambiaba a 1,5 euros por cada libra. Hay
billetes de libras del Banco de Escocia y del Banco de Inglaterra
Nivel de vida
País muy caro tanto en alojamientos como en comida, gasolina y entradas
a los museos y castillos.
Seguridad
Es un país muy seguro no creo que haya incidentes.
Electricidad
Los enchufes son los de tres clavijas por lo que hay que llevar el
convertidor aunque en los hoteles había habitualmente en las
habitaciones.
Clima
Llueve mucho e hizo frío.
Guía de viaje
Existe la guía Geoplaneta en castellano y otras guías visuales
Diario de viaje
DÍA 1
Salimos de Barcelona a las 15:30 desde la estación del Norte con los
autobuses que llevan al aeropuerto de Gerona. Teníamos comprado el
billete que ida y vuelta cuesta 21 €.El aeropuerto está a rebosar con
vuelos a distintos puntos de Europa y al momento ya empieza la
facturación.
Nos pesan las maletas que no han de sobrepasar los 10 kg de peso porque
no facturamos, y en caso de tener más se paga a 8 € por kilo y son
bastante estrictos.
Si quisiéramos facturar no podríamos sobrepasar los 15 kg y pagar un
suplemento.
Poco después pasamos el control de seguridad y con mucha puntualidad
incluso antes de la hora ya salimos. El vuelo es bastante bueno y
llegamos a las 19:30 a Glasgow – Prestwick. La ciudad está a unos 50 Km.
al sur de Glasgow.
Como Reino Unido no esta en la Zona Shengen nos controlan el pasaporte
pero muy rápido nos dejan salir. Es un aeropuerto pequeñito donde
tenemos reservado un coche con la compañía Hertz. Los 4 días con millas
ilimitadas nos cuesta 120 €, Nos dan un Focus bastante nuevo que va muy
bien.
Sales del aeropuerto y te indican donde están los coches y te buscas la
vida porque no hay nadie para ayudarte. Después de unos titubeos al
final lo encontramos y salimos del aeropuerto donde en teoría se tiene
que subir una barrera que como no pagamos se ha de apretar un botón y
decir que te llevas un coche alquilado de la Hertz, y se sube la
barrera.
Ya hemos salido del aeropuerto y con las instrucciones para llegar
al hotel que teníamos reservado, lo encontramos a la primera ¡eureka!.
Se llama Gailes Hotel and Restaurant y lo hemos reservado porque está a
9 millas del aeropuerto y los comentarios eran elogiosos.
La entrada no es nada del otro mundo pero la habitación es espectacular.
Tenemos fruta fresca a nuestra disposición, un calentador de agua
para hacernos lo que queramos y galletitas.
El cuarto de baño tiene de todo, gel , champú, crema hidratante y pone
en las instrucciones del hotel que si necesitas alguna cosa como cepillo
de dientes, crema dental o lo que sea, que vayas a recepción que te lo
proporcionan. Tienes para planchar, secador, en fin que está muy bien,
todo por 50 libras o su equivalente 75 € con desayuno escocés incluido.
También tenemos acceso a un gimnasio, un spa y un campo de golf que
evidentemente no aprovechamos.
Como no tenemos apetito nos ponemos a dormir porque no hay nada cerca
para visitar y como no nos acompaña una llovizna muy habitual por esta
zona como tendremos ocasión de ver.
DÍA 2
El desayuno empieza a las 7 de la mañana y allí estamos nosotros a ver
que nos dan.
Hay un menú para escoger pero para no pensar demasiado pedimos el
scothish breakfast. Aparte de esto hay un buffet libre de fruta, pastas,
tostadas y mantequillas de todos tipos y sabores.
El
desayuno escocés es una comida en toda regla pues engloba:
Tomate asado, salchichas, bacón, champiñones, una especie de torta de
patata, una especie de morcilla pero más seca y el haggis que es para
los valientes. Está compuesto de pulmones, corazón e hígado de cordero,
cortados en finas láminas, mezclados con harina de avena y cebolla y
todo ello embutido en el estomago del animal.
Todo esto regado con zumo de naranja y te o café.
Hay que imaginarse como te deja el cuerpo todo lo anterior, es una bomba
de colesterol pero pensamos que ya comeremos verdurita en Barcelona.
Son las 8 de la mañana porque requiere su tiempo zamparte toda esa
comida pero todavía es bastante de noche y muy nublado. Hoy el día no
mejorará estará o lloviendo o a punto de llover pero frío no hace, pues
no bajamos de los 15-16 grados en todo el día hasta que anochece.
Cogemos el coche y tras los primeros momentos hasta que coge el
conductor las medidas del coche y se habitúa al modo de conducción,
vamos rumbo al norte.
Es hora punta y hay bastantes coches ya que es el camino a Glasgow.
Según la guía Glasgow no es una ciudad con demasiadas cosas a ver y como
hemos de escoger porque con 4 días no da para casi nada decidimos pasar
de largo de la ciudad y dirigirnos a Stirling.
Esta ciudad es famosa porque es donde se libró la batalla ganada contra
los ingleses liderada por Willian Wallace en 1297, que popularizó la
película Braveheart protagonizada por Mel Gibson.
Hay que comentar que todos los puntos a visitar en Escocia están
indicados con unos carteles en marrón y blanco, y es muy fácil
orientarse porque hay miles de indicadores. También la gente si uno va
un poco perdido es encantadora y se desvive por orientarte.
Hay que comentar que una semana antes de nuestra visita había jugado el
Barça contra el Glasgow Rangers y muchos compatriotas se habían escapado
a hacer visitas por los alrededores con lo cual éramos recibidos con
mucho cariño por la gente.
En primer lugar nos dirigimos al monumento a Wallace que está a unos 3
Km. al sur de Stirling. Allí se alza un imponente monumento victoriano
con que Escocia honra la memoria de sir Willian Wallace, ahorcado y
descuartizado por los ingleses en 1305.
La vista que se contempla desde lo alto es impresionante, pero desde
donde se deja el coche en el parking hasta el monumento hay un subida
también dura por lo repentina. Cuando vas subiendo ves ardillitas de
color gris y bastante grandes que te miran con curiosidad y luego van a
lo suyo. La entrada cuesta 6 libras (multiplicar por 1,5 para pasar a €)
y se puede ver la espada de Wallace y sobre la historia de otros héroes
escoceses.
Se puede llegar también con unos autobuses llamados City Sightseeing que
van desde el castillo de Stirling hasta el monumento pasando por otros
sitios de interés, el problema es que solo dura hasta finales de octubre
y empieza en abril.
Una cosa que nos damos cuenta es que muchos castillos, abadías e
iglesias están cerradas de noviembre a finales de marzo. Las que abren,
muchas cierran jueves y viernes, con lo que muchos castillos que
queríamos visitar están cerrados.
Uno de los que abre todo el año es el castillo de Stirling. Llegamos
allá y hay que pagar 2 libras para dejar el coche y te cubre 4 horas.
Stirling es una pequeña ciudad de unos 45.000 habitantes con mucha
población estudiantil lo que le da un encanto especial.
El castillo de Stirling tiene restos desde épocas prehistóricas, porque
hay un dicho que dice “quien domina Stirling controla el país”.
Tiene un emplazamiento, una arquitectura y una relevancia histórica que
hacen que sea uno de los más majestuosos de todo el país. Está asentado
sobre un volcán apagado.
Aunque hace millares de años que ha existido en el lugar algún tipo de
fortaleza, la actual data del Siglo XIV-XVI, periodo que sirvió de
residencia a los Estuardo. Se construyó durante el reinado de Jacobo V.
Se está restaurando en la actualidad y solo se pueden visitar algunas
partes del castillo, entre ellas el Great Hall (Gran Salón) y la
Gatehouse o Torre de entrada. El Gran Salón es el salón medieval
más grande de Escocia y su restauración duró 35 años. En otra zona se
puede ver a tejedores restaurando y haciendo tapices como los que
adornaban las paredes en aquel tiempo. Hay visitas guiadas pero en
invierno son bastante pocas. Los tapices recubrirán los aposentos de la
reina. Hay un museo sobre los Argyll & Sutherland Highlanders que
explica la historia del regimiento desde 1794 hasta la actualidad.
También se puede visionar un audiovisual que explica la historia del
castillo. Cada hora hay visitas guiadas que se reúnen en la plaza
central del castillo.
La entrada cuesta 8,5 libras por persona, pero cuando la hemos comprado
nos enteramos que hay un billete que se llama Explorer Pass que se puede
comprar para 3 días entre 5 días, 7 entre 14 y 10 entre 30. El precio es
19, 27 o 32 libras y te da entrada a más de 75 monumentos y museos de
toda Escocia. Si tienes más de 60 años el precio disminuye y también se
puede comprar un pase familiar que te cuesta lo mismo que 2 adultos.
Cuando nos damos cuenta que hemos hecho el tonto porque solo que visites
2 cosas ya compensa el pase, vemos que si lo compramos hoy mismo nos
devuelven lo que nos ha costado la entrada al castillo y lo hacemos.
En todos los monumentos y museos hay publicidad de este pase y vale
realmente la pena incluso en invierno que hay muchas cosas cerradas.
Además la ventaja es que no es necesario que sean días seguidos sino que
en el intervalo de tu pase puedes escoger los días que quieras.
El casco histórico de Stirling es pequeñito y muy cerca del castillo
está la Argyll’s Lodging que es un palacete del XVII que permite conocer
el estilo de vida de la aristocracia de la época.
Bajo el castillo las calles empedradas nos llevan a la Iglesia de Holy
Rude, que es y ha sido la parroquia de la ciudad desde hace 500 años y
es donde fue coronado Jacobo VI. También está el hospital de Cowane
justo enfrente que fue construido por un comerciante para que sirviera
de hospicio y hoy se dedica a usos múltiples como acoger sesiones de
música tradicional. En el caso de que se tengan antecesores escoceses
aquí se
pueden
rastrear los datos genealógicos.
De allí nos dirigimos a Callander, Killin pasando por el Loch Lomond &
the Trossachs National Park. Este parque se hizo famoso gracias a la
novela histórica Rob Roy de Sir Walter Scott. En rigor los Trossachs son
la cañada que separa el Loch Katrine del Loch Achray pero ahora es una
zona más amplia. Hay un centro de visitantes el David Marshall
Lodge Visitor centre del Queen Elisabeth Forest Park con información
sobre los senderos y rutas ciclistas que recorren el parque y sus
alrededores. Está a 1 Km. al norte de Aberfoyle, al oeste de Stirling.
Por el camino te vas encontrando cascadas y unos parajes espectaculares
con los celebres paramos escoceses que nos vienen a la memoria con
películas como Cumbres Borrascosas o Rebeca.
Uno de los problemas de las fechas que hemos escogido para esta escapada
es que a las 4:30 de la tarde es noche cerrado con lo que el día se
acorta mucho y no da mucho de si. Nosotros aprovechamos para hacer unos
cuantos Km. más y buscar alojamiento en Oban. Es una tranquila ciudad
portuaria ubicada en una preciosa bahia de donde salen barcos para
visitar las islas cercanas y para ver colonias de focas. Tiene unos 8000
habitantes y la oficina de turismo cierra a las 5 de la tarde, con lo
que nos lanzamos a la aventura para encontrar alojamiento. Hay que decir
que ya hemos pasado por una calle donde hemos visto muchos B&B con “vacancies”.
Volvemos allí y en la primera que entro ya me parece bien y nos
quedamos. Está en Dunollie Road y se llama Torlundy Guest House.
Cuesta 45 libras que se pagan al momento y también entra el desayuno.
Descargamos las maletas y nos vamos a deambular por el pueblo que se
acaba pronto, como curiosidad tiene un coliseo como el romano llamado
McCaig’s Tower. Es una excentricidad que se le ocurrió a un potentado
local para dar trabajo a los canteros desempleados. Parece que las
vistas son espectaculares pero cuando nosotros llegamos es noche
cerrada.
Las islas a las cuales se accede desde aquí son Mull, Iona, Coll y
Tiree.
Nosotros hemos decidido dejar las islas para otro viaje.
Como todo esta cerrado y no hay nadie por las calles buscamos un sitio
para cenar. Hay poco donde escoger, hay 2 o 3 fish & chips que se han
dedicado también a ofrecer hamburguesas y comida árabe. No es nada
barato y te lo tienes que llevar a la habitación porque no hay sitio
para comer. También hay unos hoteles con restaurante con unos precios
prohibitivos, como ejemplo una ensalada verde cuesta 12 libras (18 €).
Al final vemos un restaurante que se llama Tapas y que es muy coqueto
donde comemos un plato de carne con verduras y patatas muy bien
cocinados y un plato con berenjenas al horno con queso camembert
exquisito, regado con 2 San Miguel.
A las 8 ya volvemos al hotel a descansar del día que ha sido bastante
intenso.
DÍA 3
A las 7 comienza el desayuno y ya estamos para aprovechar el día. Nos
preguntan si queremos el Desayuno escocés y le decimos que si.
Es como el del día anterior pero más sencillo.
Cogemos el coche y vamos dirección al Dunstanffnage Castle and Chapel
que está a 3 km de Oban. Fue construido sobre 1260 y aprovecha un
pedestal rocoso. Fue conquistado por Robert Bruce en 1309 durante las
guerras de la independencia. Está cerrado porque es viernes. A pesar de
eso es muy impresionante desde fuera.
Seguimos dirección norte hasta Fort Willian. Las carreteras están en
buen estado pero no se puede correr mucho porque son estrechas y esta
zona tiene algo de transito. Es una ciudad pequeña de unos 9000
habitantes y está rodeada de unas montañas impresionantes (para lo que
son las montañas en Escocia) donde está el pico más alto, el Ben Nevis
de 1344 metros. Por esta zona también se rodaron escenas de películas
como Braveheart, Rob Roy y Harry Potter y la piedra filosofal. Es una
ciudad muy concurrida en verano por aficionados de la escalada, y
deportes al aire libre. En invierno para los esquiadores. También se
puede visitar una destilería de whisky, la Ben Nevis Distillery.
De allí vamos a Fort Augustus, una ciudad de 500 habitantes, que fue una
plaza fuerte y que ahora es famosa porque transcurre por aquí el canal
Caledonia y ascienden y descienden 13 metros gracias a una escalera de
cinco esclusas consecutivas, que tiene al lado unos jardines para
ver el espectáculo. Hay un museo que explica la historia del canal. De
aquí salen unos cruceros que van por el Lago Ness a buscar al monstruo
con unos sofisticados sonares.
El
lago Ness se extiende a lo largo de 37 Km. entre Inverness y Fort
Augustus. El circuito completo alrededor del lago llega casi a los 112
Km.
Hay el castillo de Urquhart con un emplazamiento envidiable y con unas
vistas extraordinarias al lago. Hay una sala de proyecciones de video,
una exposición de objetos medievales descubiertos en el castillo y una
enorme tienda de objetos de regalo.
Esta fortaleza ha sido saqueada a lo largo de los siglos y por ultimo se
decidió volarla para impedir que los jacobitas la utilizaran. Solo queda
en pie la torre del extremo norte con unas bonitas vistas al lago.
Mientras estamos disfrutando de la visita SALE EL SOL, hace unos minutos
llovía y hacia un tiempo horrible y ahora hay sol y se está muy bien.
Pasamos por Drumnadrochit, que es un pueblo dedicado en cuerpo y alma al
monstruo, museos, tiendas y también un crucero por el lago.
Llegamos a Inverness, una ciudad de 44.500 habitantes, con poco
interés para el turista, pues quedan pocos vestigios antiguos. A 10 Km.
al norte queda Culloden, donde se libró una batalla donde murieron en 68
minutos 1200 highlanders y fue el fin del sueño jacobita. Supuso la
derrota del príncipe Carlos Eduardo Estuardo, donde el Duque de
Cumberland hijo del Rey Jorge II se ganó el apodo del carnicero por la
brutalidad con la que trató a los vencidos. Fue el fin del sistema de
clanes.
A 8 Km., se encuentra la imponente y casi intacta fortificación
artillera de Fort George, construida en el S. XVIII por el equivalente
de 1000 millones de libras actuales. Es un exponente de la arquitectura
militar europea y se termino en 1769 para acoger al ejercito que Jorge
II había desplegado en las Highlands. Tiene unas murallas de casi 2 Km.
y unas magnificas vistas sobre el mar. Cuándo llegas te dan unos
auriculares en castellano que te explica extensamente la historia y como
se organizaba esta fortificación. Aún queda un pequeño destacamento y
sirve como academia militar.
Vamos bajando dirección a Perth, donde llegamos ya un rato después de
anochecer y buscamos un sitio donde dormir. En la misma carretera por
donde llegamos del norte hay un montón de B&B, aunque algunos con el
cartel de completo. Vamos a uno que se llama Rosebank Guest House en 53
Dunkeld Road. Tiene solo 4 habitaciones con el cuarto de baño dentro y
son muy acogedoras. Solo les queda una habitación que nos quedamos
encantados. Cuesta 50 libras la doble con desayuno.
Es muy recomendable por lo que aquí tenéis la pág. web:
www.rosebankguesthouseperth.co.uk
Vamos a dar una vuelta por la ciudad pero a pesar de ser viernes no hay
nada de ambiente. Es una ciudad de unos 45.000 habitantes y muy conocida
por el palacio de Scone que está en las inmediaciones (cerrado por
supuesto). Fue la capital de Escocia y es agradable pero en estas fechas
la gente está en sus casitas resguardados del frío que aquí si que hace,
ya que estamos a unos 5 grados.
DÍA 4
El
desayuno está a la altura de nuestras expectativas. Es soberbio y un
servicio exquisito por parte de John.
Después cogemos el coche para visitar Huntingtower Castle. Está cerrado
con lo que nos vamos a Elcho Castle, y por el camino vemos unas vacas
escocesas muy peluditas y simpaticas. Este castillo también está cerrado
y no se puede entrar ni a los jardines.
Por fuera se ve muy bonito.
De aquí vamos al Castillo Campbell que está en las afueras de Dollar. La
vieja y lóbrega fortaleza de los duques de Argyll se alza entre 2
barrancos y salta a la vista porque la llamaban Castle Gloom (castillo
de la tristeza). El castillo fue saqueado por Cromwell en 1654 pero la
torre se conserva bien.
Cuando compras el Explorer pass te dan un cuadernillo donde te van
sellando cada una de las visitas que haces. Aquí la persona encargada es
entrañable, siempre te reciben con una sonrisa y te aclaran cualquier
duda que tengas.
Nos acercamos a Blackness Castle donde tenemos sol y unas vistas
espectaculares. Lo están reconstruyendo pero las torres se pueden
visitar.
De aquí nos vamos al palacio de Linlithgow, fue una de las residencias
favoritas de los reyes escoceses y aquí nació Maria Estuardo. Es enorme
con unas salas que tienen unos paneles muy clarificadores de cómo era el
palacio antiguamente y como se vivía en el. Los jardines de alrededor
está lleno de gansos, patos y cisnes.
En la entrada hay una iglesia que se puede visitar con unos folletos en
castellano que te informan de la historia de la iglesia. Hay una
polémica porque se ha puesto un chapitel metálico que queda un poco
extraño en la iglesia gótica.
Desde aquí y con sol llegamos a Edimburgh. Es una ciudad de casi 500.000
habitantes y tiene multitud de cosas a ver y disfrutar.
Nosotros solo podremos disfrutarla un poco en vistas de volver con más
tiempo. El coche aquí es un incordio, pues muchas calles son peatonales
y se tiene que dejar en un parking. También lo puedes dejar en la calle
pero hay una limitación de 1,5 horas, como en Barcelona lo cual según
donde quieras ir es un latazo. Nosotros como queremos visitar el
castillo lo dejamos en un parking que hay relativamente cerca. Cuesta
casi 6 libras las 2 horas y luego la cantidad va disminuyendo según va
pasando las horas. En la calle es un poco más barato. También
hay
que comentar que la gasolina es más barata que el diesel y está a 1
libra el litro (1,5 €).
Es más conveniente pagar con tarjeta de crédito porque el tipo de cambio
que te cobran es de divisa, por el contrario si vas a cambiar € a un
banco el cambio es muy malo. En la mayoría de B&B admiten tarjeta de
crédito, lo mismo que para pagar entradas o cualquier cosa, con lo que
siempre que se pueda se ha de tirar de tarjeta.
El castillo de Edimburg está abarrotado de gente de todas las
nacionalidades y colores. Con el Explorer pass no pagas nada pero si
quieres los auriculares que te va explicando todo has de pagar 2 libras.
Es enorme, está situado en un peñasco rocoso, también un volcán
erosionado, y era la cumbre que mejor se podía defender de toda la ruta
Inglaterra – Escocia. El portico de entrada se abre a una calle
adoquinada que pasa por la puerta de Portcullis y llega a los cañones de
las baterias Argyle y Mills Mount. Desde aquí hay unas espléndidas
vistas del estuario del Forth. Al otro extremo está el cañón One O’clock
Gun un reluciente cañón de la Segunda Guerra Mundial que cada día a las
13:00 lanza una atronadora señal excepto los domingos, el día de Navidad
y Viernes Santo. Antiguamente tenia su utilidad pues era importante
tener un referente horario de fiar para poder sincronizar los trenes,
los barcos etc.
También se puede visitar el National War Museum of Scotland dedicado a
la historia militar de Escocia. Hay exposiciones donde se van viendo
objetos personales y se explica la historia a las que pertenecieron. Es
digno de mencionar el Great Hall, construido como salón de ceremonias
para Jacobo IV y utilizado como sede del parlamento escocés hasta 1639.
El palacio real contiene una cámara acorazada que protege las joyas de
la corona escocesa, las más antiguas de Europa en su clase. La corona se
fundió con el oro de la que perteneció a Robert Bruce en el siglo XIV.
También se puede ver la piedra del destino que es un bloque de arenisca
de 67 x 42 x 28 cm con unos aros de hierro herrumbrosos a cada
lado. Se cuenta que esta piedra era originaria de Tierra Santa, que los
reyes escoceses la utilizaban como pedestal para ser coronados y
que fue robada de la Abadía de Scone (Cerca de Perth) por Eduardo I de
Inglaterra en 1296. Permaneció en Londres durante 7 siglos como símbolo
del dominio inglés sobre Escocia. El día de San Andrés de 1996 fue
devuelta a Edimburg. Algunos sostienen que es una imitación y que la
verdadera está escondida en algún lugar de Escocia pues fuentes
antiguas la describían como un bloque de mármol negro y que estaba
decorado con relieves.
Desde el castillo vamos a buscar alojamiento y como en la guía pone una
zona de B&B, que es Newington para allá nos vamos.
Nos quedamos en Sonas Guest House que está en 3 East Mayfield y su
teléfono es 01316672781. Sus propietarios son Irene y Dennis Robins y el
e-mail:
info@sonasguesthouse.com.
Son muy amables y las habitaciones están bien ya que son acogedoras.
Cuesta 48 libras con desayuno.
Resuelto el problema del alojamiento nos volvemos a seguir visitando la
ciudad.
Se paga en la calle hasta las 6 de la tarde los sábados y el
domingo no se paga.
Pasemos por la Royal Mile donde se encuentran los edificios más antiguos
y con más encanto. Grassmarket es el lugar de referencia de la Old Town,
siendo también donde se celebraban las ejecuciones publicas, un
monumento señala donde se montaban las horcas y recuerda el martirio que
sufrieron en ese lugar más de cien covenanters. Ahora está rodeada de
multitud de tiendas y pubs con un encanto especial.
Hay muchas más cosas para visitar pero están cerradas con lo cual
paseamos por las calles hasta que cierran las tiendas y volvemos al
hotel.
DÍA 5
Después
de desayunar nuestro Scotish Breakfast vamos en coche a visitar
Craigmillar Castle pero está cerrado con lo que lo vemos por fuera. De
allí ya nos dirigimos hacia el aeropuerto pero como nos queda un rato
nos acercamos a Kilmarnorck que es una ciudad donde está el Dean Castle,
un castillo con visitas guiadas gratuitas muy interesantes. Hay una
colección de instrumentos musicales que es única en su genero, armaduras
y armas de la época (Siglo XIV).
Tiene también unos jardines para pasear con un centro de visitantes que
muestra un video sobre el castillo y su historia.
Antes de la visita podemos contemplar un partido de fútbol de niños muy
reñido, pero con un gran fair play.
Y por desgracia nos tenemos que dirigir al aeropuerto a devolver el
coche y hacer los tramites para coger el avión.
Hemos hecho unas 700 millas en total.
Fin del viaje.