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«Imagináos ahora un hombre a quien, además
de a sus personas amadas, se le quitan la casa, las costumbres, las ropas,
todo, literalmente todo lo que posee: será un hombre vacío, reducido al
sufrimiento y a la necesidad, falto de dignidad y de juicio, porque a
quien lo ha perdido todo fácilmente le sucede perderse a sí mismo;
hasta tal punto que se podrá decidir sin remordimiento su vida o su muerte
prescindiendo de cualquier sentimiento de afinidad humana; en el caso
más afortunado, apoyándose meramente en la valoración de
su utilidad. Comprenderéis ahora el doble significado del término
"Campo de aniquilación", y veréis claramente lo
que queremos decir con esta frase: yacer en el fondo.
Häftling: me he enterado de que yo soy un Häftling. Mi llamo
174.517; nos han bautizado, llevaremos mientras vivamos esta lacra tatuada
en el brazo izquierdo. […]
Hoy es domingo de trabajo, Arbeitssonntag: se trabaja hasta las
trece, después se vuelve al campo para la ducha, el afeitado y el control
general de la sarna y de los piojos y, en el tajo, misteriosamente, todos
hemos sabido que la selección será hoy.
La noticia ha llegado, como siempre, rodeada de un hado de detalles contradictorios
y recelos: esta misma mañana ha habido una selección en la enfermería;
el porcentaje ha sido del siete, del treinta, del cincuenta por ciento
del total de los enfermos. En Birkenau, la chimenea del Crematorio humea
desde hace diez días. Hay que hacerle sitio a una enorme expedición
que va a llegar del ghetto de Ponen. Los jóvenes dicen a los jóvenes
que serán elegidos todos los viejos. Los sanos dicen a los sanos que serán
elegidos todos los enfermos. Serán excluidos los especialistas.
Serán excluidos los judíos alemanes. Serán excluidos los
Números Bajos. Serás elegido tu. Seré excluido yo.
[...] Parece ser que todo marcha como todos los días, la chimenea de la
cocina humea como de costumbre, ya ha empezado la distribución
del potaje. Pero luego se ha oído la campana, y ahora hemos comprendido
que va en serio.
Porque esta campana suena siempre al alba, y entonces es la diana, pero
cuando suena a media jornada quiere decir "Blocksperre",
encierro en la barraca, y esto sucede cuando hay selección, para que nadie
no se sustraiga a ella y, cuando los seleccionados salgan hacia la cámara
de gas, para que nadie los vea partir.»
LEVI, Primo. Si eso es un hombre, Barcelona: Muchnik Editores,
1987. Págs. 28-29, 133-134)
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