Mi
vida, como la tuya, se ha ido entrelazando con la de los demás.
Lo que sucede parece, de ordinario, superficial,
intrascendente. Pero,
de vez en cuando, una frase dicha como de pasada convierte ese instante
fugaz en un momento decisivo.
¡Cuántas veces hemos tenido que reconocer ante
una serie
de felices coincidencias, que todo sucedió providencialmente!